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INGENIERÍA MARINO-COSTERA

Misión

El programa de Ingeniería Marino-Costera de la Universidad del Magdalena tendrá como misión la formación de ingenieros con la capacidad de abordar holísticamente la complejidad marino-costera, a través de procesos de innovación y desarrollo que promuevan la sostenibilidad del mar y la costa.

Visión

Para el año 2030 el programa de Ingeniería Marino-Costera de la Universidad del Magdalena será reconocido a nivel regional y nacional por la formación inter y transdisciplinar que imparte a sus estudiantes, con el propósito de convertirlos en profesionales innovadores, competitivos y altamente cualificados para promover la sostenibilidad del territorio marino-costero. Esta formación permitirá a sus egresados la comprensión holística de los fenómenos, dinámicas, usos y funcionamiento del territorio marino-costero, sus recursos y la adquisición de herramientas que generarán soluciones a las necesidades de los sectores turístico, transporte marítimo y portuario, pesca y maricultura, en un contexto de cambios globales y acciones locales.

Historia

Durante el siglo XIX predomino en Santa Marta al igual que en el resto del país una educación superior incipiente e impartida a través de Seminarios dirigidos por clérigos, que no lograron consolidarse dadas las condiciones políticas que experimentaba el país al momento de las guerras independentistas, las cuales generaron rupturas y reorganizaciones constantes en todas las esferas sociales. En este contexto, es hasta 1824 que se crea la Universidad del Magdalena e Istmo, con sede en Cartagena y adscrita al Seminario Samario. Este precedente histórico genero espacios de levantamientos políticos militantes, que exigieron la creación de cátedras civiles y seculares, esta institución funciono hasta 1850, impartiendo cátedras en educación básica primaria, secundaria y de formación general, así como cátedras universitarias en Derecho (la mayor parte), Medicina (en algunos de esos años, a partir de 1835).

 

La confrontación política e ideológica que vivía el país en el siglo XIX manifiesta en partidos antagónicos desde mediados del siglo, llevaron a que las propuestas de secularización o laicización fueran adoptadas en todo el país. En la Costa se creó el Colegio Nacional de Cartagena y en Santa Marta el Colegio Provincial Santander, que fue instaurado por la Asamblea Provincial en 1850, como una institución diferenciada del Colegio Seminario.  Estas nuevas instituciones, no alcanzaron estabilidad financiera y funcionaron en constante disputa por los recursos de los Colegios Seminarios.

 

El resultado de los diferentes esfuerzos por construir una institución de educación superior en la Región Caribe, hizo posible la creación del Liceo Celedón. Por esta época en la fase final del régimen encabezado por la Junta Militar, un grupo de estudiantes del Liceo Celedón y del Colegio San Juan del Córdoba, gozando de la legitimidad política que recibió el estamento estudiantil a nivel nacional como actor social que había forzado la caída del dictador Gustavo Rojas Pinilla, solicita la creación de la Universidad del Magdalena ante el gobierno nacional. Este precedente, dio lugar a que mediante ordenanza 005 de 1958 la Universidad del Magdalena, los requisitos legales para su puesta en marcha se cumplieron hasta 1963, luego a través del decreto departamental 015 adopto el nombre de Universidad Tecnológica del Magdalena iniciando labores sólo con la Facultad de Agronomía el 10 de mayo de 1962. Luego de su aprobación legal en 1963 y el reconocimiento por parte de ASCUN-FUN, la Universidad pudo acceder a los recursos nacionales del Fondo Universitario Nacional (FUN); así mismo a finales de la década, en 1969, la UTM fue autorizada por el Consejo Superior para ofrecer la carrera en Economía Agrícola, que fue su segunda facultad, y luego, en 1970, se autorizó la apertura de la facultad de Administración Agropecuaria, (también en jornada nocturna en 1972), y en ese año también empezó a ofrecerse Ingeniería Pesquera, única en el país para ese momento y en la actualidad.

 

A finales de esa década, en 1988, de institución tecnológica se transformó en Institución universitaria, año en que adoptó su nombre actual, denominación idéntica a su nombre original, en 1958, y también idéntico a uno que también tuvo en dos momentos durante el siglo XIX: Universidad del Magdalena (en adelante UM).

 

Como es de notar la Universidad del Magdalena se ha construido históricamente como un espacio de innovación y crecimientos en la región, comprometida en cada una de sus etapas con la construcción de ciudadanos integrales, críticos y participativos. En la actualidad, la institución ha sido reconocida por el Ministerio de Educación Nacional como una Universidad de Alta calidad a través de la acreditación institucional que se le otorgó en la resolución número 16891 de 2016.

 

En la actualidad es una Institución Educativa acreditada por Alta Calidad, con una amplia oferta de programas académicos pertinentes para la región y el país: 45 de pregrado, de los cuales ocho se encuentran acreditados por alta calidad (Ingeniería Pesquera, Administración de Empresas, Economía, Enfermería, Ingeniería Agronómica, Biología, Antropología, Cine y Audiovisuales) y 48 de posgrados (18 especializaciones, 24 maestrías y 6 doctorados).

 

Paralelamente, la Universidad ha venido apostando por la transformación organizacional al servicio de los propósitos institucionales, implementando procesos tendientes al aseguramiento de la calidad. Esto le ha permitido a la Universidad obtener las siguientes certificaciones: ISO 9001:2015 (22 procesos, 239 procedimientos), NTCGP1000:2009 (22 procesos, 239 procedimientos), calificación A+ (Col) otorgada por la Fitch Ratings Colombia (por eficiente desempeño financiero). Gracias a estos logros académicos y administrativos la Universidad del Magdalena posee los elementos claves y las condiciones para desarrollar el programa de pregrado propuesto.

 

En la actualidad la puesta en marcha del plan de gobierno del rector Pablo Vera Salazar, cuyo lema principal es: por una universidad más incluyente e innovadora, se propone como reto la ampliación de una nueva oferta de programas innovadores y pertinentes que permitan dar respuesta a las problemáticas de la región y el país.

Objetivos educativos del programa

Objetivos Educativos del Programa

  1. Los graduados ejercerán la profesión en las áreas de Ingeniería Marno Costera con responsabilidad ética, fundamentos científicos y tecnológicos, espíritu innovador y competitividad.
  2. Los graduados del programa generarán ambientes de aprendizaje autónomo y continuo para el desarrollo de la disciplina y la vida en coherencia con las necesidades del territorio.

Estadísticas históricas de datos de inscripción

  • Estudiantes matriculados       
2024
I II
49 49

Resultados del estudiante

RA1: Habilidad para identificar, formular y resolver problemas de ingeniería complejos aplicando los diferentes principios de la ingeniería, ciencia y matemáticas.

RA2: Habilidad de aplicar el diseño de ingeniería para producir soluciones que satisfagan necesidades específicas considerando la salud pública, la seguridad y el bienestar, así como factores globales, culturales, sociales, ambientales y económicos

RA3: Habilidad para comunicarse de manera efectiva con una variedad de audiencias

RA4: Habilidad de reconocer responsabilidades éticas y profesionales en situaciones de ingeniería y emitir juicios informados, que deben considerar el impacto de las soluciones de ingeniería en contextos globales, económicos, ambientales y sociales

RA5: Habilidad para funcionar de manera efectiva en un equipo cuyos miembros juntos brindan liderazgo, crean un entorno colaborativo e inclusivo, establecen metas, planifican tareas y cumplen objetivos

RA6: Habilidad de desarrollar y realizar experimentos apropiados, analizar e interpretar datos y utilizar el juicio de ingeniería para sacar conclusiones

RA7: Habilidad de adquirir y aplicar nuevos conocimientos según sea necesario, utilizando estrategias de aprendizaje adecuadas.